Joan B. Llobell es uno de los enólogos y viticultores que más han revolucionado la manera de hacer vino en este país en la última década. Junto a Pilar Esteve y José Domenech fundó en 2011 la bodega con Denominación de Origen Protegida Valencia, Fil·loxera & Cia, situada al suroeste de la provincia de Valencia.
Desde entonces no han parado de elaborar excelentes vinos de microparcela con una marcada personalidad y muy fieles a la tierra donde son concebidos, los cuales se han hecho un hueco entre los mejores y más apreciados vinos de la península.
1. ¿Cómo y cuándo comenzó tu interés por el vino y su cultura?
No recuerdo exactamente, porque de niño me encantaba acompañar a mi padre cuando iba a comprar vino a granel a la cooperativa. El olor de la bodega siempre me ha cautivado. Mi padre dice que lo que más me gustaba era pasear entre los depósitos… Es un olor que tengo grabado, más nostálgico que agradable, entre vino, alcohol, vinagre, humedad y frío. El vino siempre ha estado presente en casa y sobre todo los fines de semana y en las celebraciones,
cuando se abría alguna botella más especial. Más tarde ya estudiando en Valencia es cuando va tomando fuerza el interés… Las cenas de amigos y compañeros, las tertulias en Bodega Fila los jueves cuando salíamos los
estudiantes a darlo todo… De esa forma el vino poco a poco va cogiendo una posición preferente en mis aficiones y gustos.
2. ¿Cuándo te planteaste por primera vez dedicarte a esto de manera profesional y cómo diste el salto?
Estudiando en el Instituto visitamos las cavas de Codorniu y fue como un “yo de mayor quiero hacer esto”.
Más tarde en el año 1999 recién terminada la carrera de Ingeniero Agrónomo hicimos tres amigos una visita a Más Martinet en Priorat y fue como una revelación: pensar que quieres dedicarte a esto profesionalmente,
hacer lo mismo que hace esta gente, la cata que hicimos de vinos de barrica con Adrián Pérez y la visita a la finca fue como una luz. En el año 2002 surgió la posibilidad de comenzar a trabajar como técnico de campo en la Cooperativa La Viña de Font de la Figuera y ahí empecé de forma profesional.
3. Son muchos años desde que comenzaste tu carrera profesional, ¿crees que ha evolucionado mucho el sector desde entonces? ¿Cuáles han sido los cambios más significativos?
El sector ha cambiado y está cambiando muchísimo, creo que lo más importante es la incorporación de técnicos tanto en bodega como en campo. Cuando empezaba no era habitual que hubiese técnicos de campo ni que la
viticultura estuviese gestionada por personal cualificado. Los agricultores lo hacían lo mejor que sabían con la ayuda de las OCAPA de la Consellería. En bodega se ha producido una gran incorporación de tecnología, asociada también a la entrada de profesionales más cualificados que han provocado una gran reforma en la elaboración de los vinos.
Otro cambio muy importante es la aparición de pequeños productores con buena formación y sin muchos miedos, ni complejos, que se están dedicando a expresar como entienden ellos su zona, sus variedades, su forma de trabajar, su
agricultura y su clima, y están ofreciendo un abanico de vinos que hasta ahora solo veíamos en otros países. Esto está poniendo delante del consumidor una cantidad y una variedad de producto que hace que el futuro sea muy
emocionante.
4. ¿Y el consumidor, ha cambiado también desde tus inicios?
Por supuesto, el consumo de vino ha cambiado y ha cambiado porque ha cambiado el consumidor. El vino era un producto consumido como parte de una dieta y ahora es más una parte del disfrute, el consumo ahora es más
hedonista.
5. ¿Crees que en general el público es más entendido ahora que antes? ¿En qué lo has notado?
Creo que en general se bebe menos y mejor. Ahora el público es más fino, exquisito o selecto a la hora de comprar; entendido depende, por qué en ocasiones se rigen más por modas o influencias que por criterios propios. Pero
también es verdad que unas cosas llevan a otras, lo importante es que el consumidor pruebe cosas, y cosas diferentes, y poco a poco vaya construyendo su criterio.
6. ¿El vino goza de buena salud en nuestro país?
Creo que goza de mejor prensa que salud, parece que está muy de moda, es muy “cool” (moderno) beber vino, pero el consumo per cápita como país productor está rozando el ridículo. Creo que entre todos deberíamos hacer más “fácil” el consumo. Parece que si no eres un experto no puedes beber vino, tienes que hacer algún curso de iniciación a la cata o alguna cosa de estas. Y no, el consumo debe ser más sencillo. No tener miedo a equivocarse, o a que te guste algo diferente, el vino es para disfrutar y divertirse, tanto íntimamente como de forma social, y algo así debe
estar al alcance de todos.
7. ¿Cuáles son las principales virtudes de nuestro país como productores de vino?
Creo que España es el mejor país para tomar vinos del mundo, por la relación calidad precio que tienen, este sería el principal factor, seguido por la gran diversidad que podemos encontrar dentro de las diferentes zonas de producción, Denominaciones de Origen, variedades, tipos de elaboraciones y crianzas,…
8. ¿Y nuestros principales defectos?
Que no nos creemos que somos buenos. La aparición de grandes vinos y grandes elaboradores en España irá cambiando esto poco a poco, pero la percepción general está lejos todavía, y aunque el nivel medio es muy aceptable,
no somos conscientes de ello, cuando es muy fácil encontrar un vino español por un precio muy asequible y que esté muy rico. En otros países productores hay que subir un poco el tamaño del billete para comprar un vino de la misma
calidad.
9. ¿Cuál es el estado del mercado en la actualidad?
Creo que está muy reservón, como esperando a ver qué pasa, sobre todo a nivel nacional, aunque hay un mercado nuevo que va descubriendo productos y zonas nuevas. Sin embargo la evolución es muy lenta, porque la parte importante del mercado prefiere los productos consolidados. Aunque creo que conforme los consumidores vayan probando más zonas, variedades y elaboraciones se irá abriendo y se irán incorporando a los gustos de la gente.
10. ¿Hacia dónde se dirige el sector en un futuro próximo y a qué retos deberemos enfrentarnos?
Creo que se van a ir diferenciando dos mercados cada vez más claramente, el gran consumo y la especialidad, cada productor deberá ir afianzando su opción y el consumidor va a tener cada vez más claro para que sirve cada
producto. En cuanto a la producción creo que la mejora va a ser imparable, la inquietud de los profesionales va a hacer que los vinos producidos tengan mayor calidad a nivel general y que se van a hacer vinos con un carácter
mucho más marcado, creo que las zonas de producción van a ser más reconocibles sobre todo en vinos especiales, mientras que en los vinos de gran consumo se vaya a producir una estandarización.
Si quieres probar alguno de sus vinos, ponte en contacto con nosotros a través de nuestro email: bodegasantander@gmail.com. O llámanos a los teléfonos: 963771068 / 963773947
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